- CAPITULO SIETE -
A pesar de encontrarnos a gustito en nuestro nuevo patria, echábamos mucho de menos los que se habían quedado atrás.
Sobre todo mi madre añoraba los suyos.
Aun me acuerdo como los sábados nos pelabamos los tronquis PA ver quien se podía quedar a comer en casa de la abuela.
Ese olor a pera con canela y pollo con limón..
Ella en el umbral de la puerta ansioso por vernos llegar, y su persuacion por dejarnos estar.
También la hermana de mi abuela solía andar por allí. Una solterona de oro, guapa, graciosa, tacaña, solitaria, anticuada pero a la vez moderna. TO un personaje con nombre de MARIA.
Las dos hermanas parecían una goma elástica. Donde veías a una.. la otra siempre rebotaba atrás. Mi abuela no había tenido una vida fácil, pero siempre se las escuchaba regalandole una carcagada a la vida.
Por ello nos impacto cuando el papuchie nos comunico que la tía Maria estaba malita. Según los médicos su vida se apagaba poco a poco y ya no tenia ni fuerzas de luchar para sobrevivir.
A sus 85 años había dejado de meter mano a los enfermeros y ya ni piropeaba a los médicos, lo cual demostraba que su existencia en el mundo de los mortales ya no seria por mucho mas tiempo.
Con nostalgia rebusco en el pasado y los recuerdos me vienen como un cálido soplo de viento dibujando una sonrisa en mi rostro.
Lo que mas nos gustaba era su Don de contar historietas. Algunos nos hacían temblar muertos de miedo, otros nos hacían reír a carcajada, y algunos nos hacían llorar. De pequeños nos pasábamos horas y horas escuchandola narrar. Y ansiosos esperábamos algún acontecimiento familiar en la cual sus cuentos cogían un tono picaron por culpa de la ginebra de cereza.
Recuerdo como en cada fiesta familiar se repetía la misma tradición..
Mi abuela furiosa en el umbral de la puerta refunfuñando a sus hijos por haber emborachado a la tia Maria. Y observando con preocupación como esta se alejaba haciendo ZIC-ZAC con su bicicleta del año de la picoreta.
Mi padre y mi tío solían hacer caso omiso a la regañina de su madre, y siempre chillaban las mismas palabras de despedida..-“TIAAA.. ya sabes... MAS VALE SER PILLADO POR EL CONDUCTOR QUE POR EL AUTOBUS!!!-
Y ella pedaleando a cámara lenta e esquivando coches siempre contestaba.. que Dios os oiga Jo'ios.. QUE DIOS OS OIGA!!!
Que mujer, con su porte tan elegante y su inocencia a pesar de su avanzada edad.
Inocencia que una vez mas se hizo eco cuando cumplió años.
Toda la aldea se presento en el bar del pueblo para festejar con ella la fiesta sorpresa que le habían preparado mi papuchie y su hermano.
Y que contenta se puso cuando le hicieron entrega los regalos.
Sobre todo ese vibrador le hacia mucho ilusión..
Esa cosa lo había deseado tener TOA SU VIDA.
Con efusivos abrazos agradecía a todos los presentes, incluso al cartero que paso por allí le alabo el detalle.
-POR FIN YA NO LE DARIA MIEDO IR EN BICI POR LA NOCHE..- aun la oigo exclamar.
Y recuerdo las caras asombrados de los invitados viendo como Tía Maria apuntaba a diestro y siniestro con su nueva adjudicion.
Aquella cosa fosforita que apenas daba luz..
Durante toda la noche pegaba con ella algún que otro porazo en la mesa, dándose cuenta que era la única forma de hacerlo funcionar. Con frenesi le apretaba todos los botones pero ni asi aquel aparato se desarollaba como se suponia que tenia que desarollar.
VAYA MIERDA DE LINTERNA QUE LE HABIA ENCASQUETAO SUS SOBRINOS!!!!
Aquello apenas daba luz y encima vibraba.. y por si fuera poco..cuando lo mirabas detenidamente parecía UN PEN..!!!
Tal día en el bar del pueblo, NINGUN ALMA se atrevió a revelar la verdadera función de la linterna de la Tia Maria.
Así paso..
Y así la sacaron en el periódico local. Haciendo zic-zac en una bici.. Borracha como una cuba y con su preciada linterna fosforita intentando alumbrar la carretera.
Tres meses les negó la palabra a sus sobrinos por haberla regaloa el dichoso aparato sin explicarle su verdadera función.
Y tres meses tuve que esperar para lanzarle pregunta del millon que me rondaba por la cabeza.
Porque nunca se había casado la tía Maria??
La contestación a mis dudas se vieron aclarados tres meses después..
Y su razón de ser me pareció de lo mas peculiar.
Segunda guerra mundial..
A lado de la casa de mis vice-abuelos se encontraba un cuartel.
Y en ello un centenar de soldados.
Según mi tía, no eran de los nuestros.. si no que estaba invadido por los Alemanes.
Aquellos enemigos con los cuales en cuanto menos se le entablaba conversación.. mejor.
Mas porque tenían escondido una persona en el sótano, y nadie podía percatar la existencia de dicho hecho.
Día tras día, Tia Maria tenia que pasar por delante del cuartel.
Y día tras día, fue piropeado por los cabezas cuadradas como indicaba ella.
Era una mujer hermosa y con porte lleno de elegancia.
Ella hacia caso omiso a todo lo que la decían, y diariamente andaba con cabeza baja y paso ligero por el mismo sendero.
Hasta que un día uno de los soldados la llamo insistentemente indicándola que se le acercara a la verja.
Ella alemán no hablaba, y su conocimiento por lo idiomas no llegaba muy lejos. Pero si lo bastante como para poder descifrar esa palabra tan deseado y sonado en aquellos tiempos.. ESSEN.
Lo que venia a ser lo mismo que COMIDA.
Pasaban tanta hambre, dado que los repartos de vales de comida eran escasos y en casa habían muchas bocas que alimentar. Semanas habían transcurrido en que no habían comido nada solido y el estomago de tía Maria pegaba botes ante tal mágica palabra como podria ser COMIDA, aunque fuese en alemán..
Tímidamente alzo la mirada y vio como un soldado alemán le alcanzaba una salchicha por la ranura de la verja. Según ella, aquel trozo de carne fue lo mas delicioso que comió en todo su vida.
Pero pasaron otras dos semanas.. El hambre y la miseria les volvia a azotar de nuevo, y ya nadie se acordaba de aquel delicioso salchichón. Presa de desesperación tía Maria paseaba horas por delante del cuartel con la esperanza de volver a ver el amable enemigo que le había proporcionado aquel trozo de carne.
Sin embargo ese dulce rostro había desaparecido y en su lugar había un apestoso gordinflón.
-¿Was willst du? (¿Que quieres?)- Bramo cuando tía maría paseo por decima vez ante el.
Su cuerpo se tenso ante tanta hostilidad.. Dios, ya no se acordaba siquiera como se decía “COMIDA” en alemán.
Estrujiendo la mente escupió la primera palabra que le vino a la mente.. “WURST” (CHORIZO).
Según ella, el alemán ni se inmuto. Pero el hambre era mas fuerte que los miedos y su sentido de la vergüenza. Ella no podía volver a casa mirando los ojos hambrientos de esos seres queridos sin aquel chorizo tan deseado.
Por ello se armo de valor, se dejo caer de rodillas.. alzo las manos al cielo y imploraba repitiendo una tras otras vez la misma palabra... “WURST”.
El gordinflón por fin entendió sus suplicas y acto seguido bajo los pantalones empujando su tan deseado tesoro por la ranura de la verja..
Allí fue donde detuvieron tía Maria por primera vez...
El primer caso de acoso sexual en el pueblo.
Ella que sabia.. No había visto cosa igual en toda su vida.. es mas.. en el transcurso de los hechos no habia desviado su mirada del suelo siquiera..
Como se iba a imaginar que el “WURST” que sobresalía de la ranura de la verja estaba atado a un cuerpo.. cuerpo que era el del apestado gordinflón.
Años y años pasaron.. y no transcurrió ninguna noche en la cual las pesadillas cesaron.
Pesadillas llenas de “WURST”.
Y tía Maria se fue haciendo mayor, sin querer saber nada de noviazgos.
Hasta que un buen día, a sus 40 primaveras conoció un galán.
Según ella guapísimo era el menda.
Le regalaba flores, bombones y le cantaba la serenata en el jardín de su casa.
Decidió que había llegado el momento oportuno para acabar con las neuras..
Quien sabe.. A lo mejor confrontándose con el chorizo masculino de su tal apreciado galán se podía deshacer del sufrido insomnio!!
Determino acabar con sus miedos y tirar al traste los malos recuerdos..
Seducía al pretendiente y ansiaba a algo mas..
El hombre del mundo no se negó..
Con deleito le llevo al huerto, y na mas desvestirse le obsequio un condón.
Tia Maria se encontraba con las bragas al suelo, muerta de miedo y sin saber que hacer.
Y con las instrucciones del galán tampoco se apañaba mucho..
Plastificar un chorizo.. Donde se ha visto eso???
En el pueblo de tía maría desde luego que no.
Y en los tiempos que corrían.. menos aun!!!
Es mas.. según ella ni siquiera supo donde abraham encontro la mostaza!!!
Pero el galán era paciente, y tía Maria con ganas de querer saber!!
Durante 46 minutos intento plastificar la entrepierna de su amado.. sin éxito alguno.
Aquel globo.. no se ponía al sitio ni a la de tres.
De arriba abajo se deslizaba la bolsita PA'L chorizo..
Y el galán... volviéndose mas gilipollas cada vez!!!
Ninguna ayuda recibió por su parte..
Así que allí estaba ella.. sudando la gota gorda mientras que el inútil no cesaba de nombrar a su “MADRE”!!!.
Cuanto le indigno que su galan queria tener los suyos cerca al desflorarle la vida.
Como si la puñetera de su madre si que sabría como colocar aquel maldito globo.
Menudo marano de hijo tenia.. tanto esfuerzo.. y al final para que.. PA terminar con una sustancia asquerosa y pringosa entre los manos!!!
Asi se lo digo.. Que vaya rollo, era eso de hacer el amor!!
El Galan era buena gente y por lo visto.. y según version de la tia.. no tomo en cuenta su desconocimiento por colocar un globo en condiciones.
Se despidió con un beso apasionado.
Y nunca mas lo volvió a ver..
Así que PA que se iba a casar..
Si hacer el amor era una guarada..
SI.. Definitavimente..
PA QUE DEMONIOS SE IBA A CASAR???
PA colocar globos el resto de su vida???
Ya ves tía maría... incluso tu estas en este guion.
Me alegro que dejaste de sufrir, y que al final te marchaste con los tuyos.
Nos acordamos de ti, aun a fecha de hoy y te agradecemos las veces que nos hiciste de reir.
Y.. analizando tu educación sexual.. y suponiendo que verdaderamente existe “el mas allá”..
Espero y deseo de corazón que por fin llegaste a encontrar un angelico..
PA QUE TE MIMEN, TE CUIDEN Y TE ENSEÑEN POR FIN LO QUE ES..
LA GRACIA DE DIOS!!